Nuevas extensiones de nombre de dominio: lo básico

A lo largo de los años, los compradores potenciales de nombres de dominio se han visto enfrentados a opciones cada vez más limitadas para sus sitios nuevos con las extensiones más populares, como «.com», «.net», «.org» o incluso «.fr». En un contexto donde la oferta sigue disminuyendo, resulta más difícil encontrar un nombre de dominio que sea a la vez corto (y, por consiguiente, fácil de recordar), pertinente y único.

La introducción de nuevas extensiones de nombre de dominio en este mercado antes saturado «ha dado rienda suelta» a muchas posibilidades. Estas nuevas extensiones se dividen en tres categorías: extensiones abiertas, extensiones semi-abiertas (pensadas para fines específicos) y extensiones cerradas.

Disponibles para todo el que desee adquirirlas, las nuevas extensiones «abiertas» de nombre de dominio tienen múltiples usos. Por ejemplo, muchas de ellas presentan caracteres del alfabeto no latino como el árabe, el chino, el hebreo, el sánscrito y el tailandés. Así pues, ayudan a que la web sea más accesible para las comunidades que no hablan inglés.

También se han añadido extensiones geográficas distintas de las que representan a los países: quienes deseen mostrar el vínculo que los une a un área, una ciudad o una región específica podrán incluir en el nombre de dominio de su sitio una extensión de tipo «.paris», «.corsica», «.alsace» o «.nyc», entre muchas otras.

Las extensiones genéricas (que engloban a las extensiones geográficas) están pensadas para quienes deseen plasmar de mejor manera el contenido de su sitio en el nombre de dominio: permiten destacar otros rangos distintivos del sitio web. Por ejemplo, la extensión «.buzz» podría resultar beneficiosa para un sitio web centrado en noticias potencialmente virales.

También existen algunas extensiones nuevas de nombre de dominio que representan sectores de actividad específicos, tales como «.bio», «.sport» o «.art».

Pensadas para un público meta bastante específico, las extensiones de este tipo, como «.museum», «.coop», «.bank» o «.finance», constituyen una opción con mucho potencial para los compradores que buscan un producto de alto valor añadido.

Estas nuevas extensiones de nombres de dominio están dirigidas a grandes empresas, organizaciones y marcas que puedan tener su propio nombre como extensión. Por ejemplo, grupos como L'Oréal o la SNCF pueden aplicar a sus sitios web una misma extensión principal que el público pueda reconocer al instante.